lunes, marzo 14, 2005
Dime con quién andabas...
...y te diré quién eras.
Al parecer nuestro vecino dictócrata, en otros tiempos, tenía una relación bastante estrecha con algunos voceros de las FARC en su país. Pero ahora le ha tocado morderse la lengua.
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Ya éste tipo de acusaciones habían sido hechas en el pasado en el Ecuador, pero no habían recibido tanta atención por parte de los medios, tanto los oficiales como los privados y los "independientes" (¿existe realmente alguno que lo sea?) en nuestro país. Es más, todavía no la reciben del todo.
Se puede entender, aunque no se comparta, la posición de neutralidad frente a nuestro conflicto que algunas (o muchas, quizás) personas en los países vecinos quieran asumir. Pero sólo hasta ahí.
Entrar a dialogar directa y repetidamente con las FARC en tiempos que no son de paz es algo a otro nivel, y mucho más el empezar a hablar de "acuerdos asumidos" o de la existencia de campamentos. Eso ya es a otro precio.
Sin llegar al extremo de decir que sólo nosotros tendríamos el derecho de intervenir en los asuntos de otros países, sí que tenemos el de reclamar que no se intervenga pasiva o activamente en los nuestros, favoreciendo a uno de los grupos armados, pero no a la autoridad legal (así sea una autoridad tan frágil y tan llena de tachones como la que hay aquí).
En cierta forma, ésta crítica ya llegaría algo tarde, porque en éste momento el gobierno del Ecuador sí que nos está colaborando...pero sabiendo lo relativamente inestable que está la situación política en el vecino país (en buena parte por las acciones u omisiones de su presidente), no sobraría tanto el hacerla.
Para reclamos penales, favor no contacte al autor. Seguramente se le practicará la abstención activa.
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